jueves, 17 de noviembre de 2011

Poder Latino y Ocupando Wall Street



Poder Latino

De acuerdo a datos recientemente dados a conocer por la Oficina del Censo de los Estados Unidos, correspondientes al censo poblacional llevado a cabo durante el 2010, la población latina o hispana se ha incrementado en los últimos 10 años en un 43% para hacer un total de 50.5 millones lo que equivale al 16.3% del total de la población del país de 308 millones de habitantes. Estos datos hacen que la comunidad latina se constituya en el segundo grupo mayoritario, no la primera minoría, residiendo aquí en los EUA. Sin embargo este aumento o auge poblacional no se refleja en otros aspectos, como en lo político, económico y social, pues en esto sí que estamos jodidos. En cuanto al poder político que debería ser proporcional a su crecimiento demográfico, los 50 millones de latinos son apenas representados en el congreso estadounidense por 26 congresistas y 2 senadores, los cuales con la excepción del congresista por  el estado de Illinois, Luis Gutiérrez, casi nadie sabe de ellos a nivel nacional. En lo económico, a pesar de ser una comunidad muy trabajadora y emprendedora, los niveles de pobreza son altos, se considera que de los más de 50 millones de latinos  un 28% viven bajo el nivel de pobreza ($22,350 para una familia de 4 miembros) constituyéndose en el grupo demográfico más pobre en el país después de la comunidad afro-americana. Otro factor que influye grandemente y de manera negativa en el desarrollo integral de la comunidad latina es en lo educativo, pues a pesar del incremento en el número de jóvenes estudiantes que se enrolan en programas de educación superior universitaria todavía no es suficiente para alcanzar el nivel educativo de otros grupos étnicos. A esto sumémosle los altos niveles de deserción escolar prevalente entre los estudiantes de escuela secundaria (high School) que está considerado como el más alto entre los jóvenes estudiantes en el país.

Lo anterior pinta un cuadro nada alentador para la “segunda mayoría” residente aquí en los Estados Unidos. Demuestra que en lo esencial (poder político) es una comunidad débil con poca capacidad de influir en la toma de decisiones en las altas esferas del poder en donde se diseñan y ejecutan las políticas que afectaran positiva o negativamente las condiciones de vida de sus miembros. Claro que la comunidad latina tiene un alto potencial político como quedó demostrado en las elecciones que llevaron a G.W Bush y a Barak Obama a la presidencia. Fue un factor determinante. Aunque a la larga fueron esfuerzos inútiles que no rindieron los frutos deseados, pues ante la falta de un sólido como congruente liderazgo político con una agenda bien definida, la tan anhelada reforma migratoria, no pasó de ser una mera promesa de campaña. La comunidad latina no puede depender de un puñado de políticos oportunistas y sin agallas que dicen representar sus intereses, si lo primero que hacen es plegarse a la agenda política de Republicanos y Demócratas que están más interesados en satisfacer los intereses económicos de los grupos económicos que han financiado sus campañas de elección, que en atender las necesidades de un pueblo que se debate en una crisis económica de grandes proporciones. No se necesitan líderes políticos hispanos que lo primero que hacen es adoptar la retórica imperialista estadounidense y quienes a viva voz proclaman la eliminación de todo vestigio revolucionario en Latinoamérica.  Se necesitan líderes comprometidos con los intereses de quienes los han elegido, líderes que tengan los cojones para enfrentarse y contrarrestar la ola de campañas y medidas anti-inmigrantes de todo tipo, que están afectando de manera dramática la vida de las decenas de miles de inmigrantes documentados e indocumentados que su único delito es querer salir de la miseria y la pobreza.

Recientemente quedó demostrado en las elecciones locales que se llevaron a cabo en Arizona, lo que una comunidad con el potencial político y la organización necesaria puede lograr al brindarle una patada certera en el trasero al mal nacido de Russell Pearce, uno de los legisladores más poderosos de ese Estado y el principal arquitecto de una de las leyes anti-inmigrantes más severas y perjudiciales en todo el país. Lo sucedido en Arizona debería de ser el preludio o el punto de partida que sirva como ejemplo para la formación de un frente amplio o un movimiento de carácter político a nivel nacional en el cual se articulen de manera concreta las aspiraciones y necesidades de toda la Comunidad Latina. Debe de ser un movimiento que de alguna manera asemeje al liderado  por Cesar Chávez en los 60s y 70s. Tiene que ser un movimiento que tenga como base todos los vecindarios y localidades en donde resida la mayoría de la población latina, con líderes que sean el producto de esas comunidades y residan en ellas, lideres que representen de manera auténtica el sentir de esas comunidades. Pero sobre todo debe de ser un movimiento político bien sólido con una agenda eminentemente pluralista que nos se ajuste, que no se comprometa con las ambiciones partidistas tanto de Republicanos como tampoco de Demócratas. Debe de ser un movimiento que no le asegure a ningún político oportunista la posibilidad de ser electo a cambio de promesas de campaña solamente. Un movimiento político que le haga saber a los Obamas que no den  por asegurado el voto de la Comunidad Latina.

Es tiempo entonces de poner en marcha el Movimiento Latino de Masas en los Estados Unidos, y de hacer que El Poder Latino no se remita a un grafiti pandillero o a una línea de alguna canción reguetonera.





Ocupando Wall Street

Lo que hace aproximadamente dos meses empezó como un movimiento espontáneo de masas, con decenas de jóvenes protestando y acampando en las inmediaciones del símbolo más notorio del capitalismo global, Wall Street, se ha convertido poco a poco en un movimiento, aunque todavía incipiente y un tanto desorganizado, que ha adquirido características que a un principio y dada la naturaleza de los iniciadores del mismo y de la propia sociedad norteamericana eran impensables. Más que un acto de extravagancia llevado a cabo por jóvenes con atuendos y looks extravagantes que la cultura del entretenimiento y el consumismo Americano celebra y propone como únicos de su excepcional sistema democrático capitalista. La ocupación de Wall Street ha puesto en relieve ante los ojos del mundo entero la inequidad de todo un sistema en donde la acumulación de riqueza en beneficio de un puñado (1%) atenta directamente en contra del bienestar de la mayoría (99%) que hoy experimenta en carne propia los estragos de la crisis financiera que se abate en todos los rincones de este país. Para más información a cerca de las particularidades de este evento y su posible incidencia como fuerza catalizadora que cristalice en un cambio al actual sistema pueden seguir el siguiente enlace http://lacunadelsol-indigo.blogspot.com/2011/10/indignados-ayer-y-hoy.html

El martes 15 de noviembre en horas de la madrugada los manifestantes acampando en el parque Zuccotti o Liberty Park de la Ciudad de Nueva York, fueron violentamente desalojados por la policía por órdenes del alcalde de la Ciudad de Nueva York, el liberal y billonario Michael Bloomberg. La policía como de costumbre y actuando con toda la violencia que la ley le permite arrestó a unas 200 personas quienes a esas horas se encontraban acampando en el parque después de abusar de ellos. No es de extrañar el comportamiento de la policía en estos casos pues como ha quedado de manifiesto en otros lugares, como lo sucedido con los manifestantes en Oakland, la policía actúa para proteger los intereses y la integridad personal del 1% mientras que el 99% es visto como el enemigo al que hay que someter, encarcelar o matar. Esa es la lógica criminal con la cual las fuerzas de seguridad en nombre de la democracia actúan en las sociedades capitalistas. Se imaginan ustedes amigos lectores si esto estuviera sucediendo  en Venezuela, seguramente que los dragones norteamericanos y de la OTAN ya estarían sobrevolando sobre su territorio en preparación para una “misión humanitaria.” A estas alturas y después de haber sido violentamente desalojados de los lugares de concentración que los manifestantes anti- Wall Street han ocupado en diversos puntos del país no se sabe que sucederá con el mismo. No se sabe si este movimiento se transformará en un sólido bloque que no solo cuestione sino que rete  de manera enérgica y decidida  la actual estructura del poder capitalista-corporativo o si por el contrario y como predicen algunos será cooptado, o ya lo ha sido, o simple y sencillamente se desvanecerá en la irrelevancia.

Para terminar quiero informar que el día de hoy jueves 17 de noviembre, en Nueva York, Dallas, Portland, San Luis, Las Vegas, Filadelfia y otras ciudades se están llevando a cabo manifestaciones de protesta con choques violentos entre la policía y los manifestantes, se reportan muchos heridos y arrestados. Lo anterior podría ser un indicio de que el movimiento anti-Wall Street se esta radicalizando adoptando un tono decididamente anti-capitalista.

La dinámica de la guerra global es una función del colapso del capitalismo y de la democracia en los Estados Unidos y Europa. La brutal represión de los manifestantes anti- Wall Street a lo largo y ancho de los Estados Unidos es una evidencia de lo último. La guerra es un resultado lógico de este sistema fallido, como la historia nos ha demostrado con los horrores de las Guerras Mundiales I y II.
Marx lo dijo: “La historia se repite, primero como tragedia, luego como una farsa.” Para prevenir otra “farsa” y que se repitan los horrores de la historia, necesitamos de una vez y por todas combatir la raíz causal: El Capitalismo.----Finian Cunningham


Marvin Najarro


























Publicado Por Marvin Najarro

No hay comentarios.: